Mucho ha llovido desde que un joven Samuel Omrani abriera su restaurante Libanés en la calle Muntaner de Sabadell en el año 1997. Gracias a él conocimos las samosas (una especie de empanadillas), el falafel (un tipo de croquetas), el hummus, el pan pita, el shawarma, el baklavas y toda suerte de delicias de la cocina árabe. Pasó luego al Eix Macià en el 2000 donde permaneció varios años y después de un sinfín de avatares el pasado mes de julio abrió en el 152 de la Avinguda 11 de Setembre con un nuevo local que lleva el mismo nombre: Libanés.
Es establecimiento es grande y luminoso y cuenta con una terraza en la acera. Su gastronomía se basa en las especialidades libanesas de gran calidad. Su shawarma es artesano, elaborado en la cocina con sietes especias; puede ser de cordero (riquísimo), ternera y pollo. Se puede comer en plato y también dentro de un pan de pita en plan bocata. Aderezado con la salsa de sésamo y la picante es probablemente uno de los mejores bocadillos que se pueden comer en el mundo!
El listado de recetas libanesas es amplio como ya he comentado. Una buena manera de probar de todo es pedir entre varias personas el Mazza que es un completo banquete que se sirve en la mesa y se puede comer casi de todo. El postre por excelencia es el baklavas, que son esas pastas dulces de hojaldre, miel y frutos secos; la calidad que ofrece Samuel es realmente excelente.
Después de la comida se puede disfrutar de un té de menta o de canela y si somos más de café nos pueden preparar uno al cardamomo que según Samuel "es afrodisíaco". Y de copa está el Arak, una especie de anís que se toma con hielo y que es digestivo.
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